Crónica del torneo de Héctor

Este fin de semana pasado se disputó un torneo en el Grao de Castellón, ya que había parón liguero. Allí disputaríamos en una liguilla de 6 equipos cinco partidos. Pasando a las semifinales los 4 primeros.

El sábado jugamos los 4 partidos (con una duración de 40 minutos totales), ya que el Benicásim anunciaba que se retiraban, por lo que quedaríamos 5 equipos. El primer rival al que nos enfrentamos fue el anfitrión: el San Pedro. Los nuestros empezaron el partido muy dormidos, quizás por el madrugón, porque cuando nos quisimos dar cuenta ya perdíamos 1-0. A pesar de esto el equipo en ningún momento se descompuso. La iniciativa, como ocurriría a lo largo de todo el torneo, fue en todo momento nuestra, así como también el buen juego y la deportividad, ya que a penas cometimos faltas. Los chicos trataron siempre de salir construyendo desde atrás y buscando muchos las bandas, con Hugo y Adri dirigiendo desde el centro del campo el juego. Las ocasiones no tardaron en llegar, como el balón que estrelló en el palo Álvaro, pero no conseguíamos abrir la lata porque acababan en las manos del portero la mayoría. Así llegaríamos al descanso, en el cual se les dijo que siguieran como lo estaban haciendo porque llegaría la recompensa. Y así fue. La segunda parte fue excelente, a pesar del 2-0 que recibiríamos, ya que en ella el equipo logró marcar 4 goles, siendo el primero de Pablo y venció finalmente 4-2. El asedio sobre la portería del San Pedro fue total, aunque el 2-0 pudiera haber hecho que bajáramos los brazos no fue así, y el equipo practicó un fútbol buenísimo, con el premio de remontar el marcador y casi golear incluso. Después, tocaba el Torresport.

Tras el partido, jugaron Torresport contra Costa Azahar, dos de los rivales del grupo de David y Héctor. Empataron a 2 en un choque muy igualado y gracias a un gol en propia portería del Costa Azahar.

Cuando este partido finalizó, jugamos ante el Torresport. Los informes de Héctor y David no sirvieron para llevarnos el gato al agua, ya que este partido lo perdimos 0-1 a pesar de que se repitió la historia. El Torresport se dedicó a esperarnos en su campo y sobre todo en su defensa. Tratando de robar cualquier balón que pudiéramos rifar y salir a la contra, siempre con las ideas claras y con su número 17 como jugador más destacado, el cual mandaba desde el centro del campo y el juego de su equipo se basaba en lo que él creara. La pelota, al igual que ante el San Pedro, fue nuestra durante todo el partido y con ello tratamos de buscarles las cosquillas, pero apenas dejaba huecos. Y fue en uno de esos balones rifados cuando se plantaron 2 jugadores ante Víctor, batiéndolo en su salida y haciendo el 0-1 que no se movería y ante el que nada pudo hacer. La verdad es que casi no tuvimos ocasiones, pero ellos tampoco nos inquietaron mucho, así que lo justo debería haber sido el empate.

Esta derrota no afectó a los chavales, acostumbrados a ganar como lo están esta temporada. Tras la comida en el Pingüin's, tocaba jugar ante el Olímpic de Castelló. Un Olímpic que como confirmarían sus entrenadores a Héctor y a David estaba mezclado con el "B" (ellos eran el "A"), contando con algunos jugadores muy buenos, como luego muy bien pudimos comprobar y donde. El partido empezó muy bien para nosotros, en poco más de los primeros 10 minutos nos pusimos 0-2 arriba en el marcador, pero se produjo una relajación en lo que quedaba de primera mitad y lo acabamos pagando: 2-2 al descanso. En él les dijimos que podíamos ganar tranquilamente el partido, pero si no cometíamos nuevas relajaciones. El efecto se cumplió en parte: nos volvimos a adelantar y volvimos a ponernos con dos goles de ventaja, 2-4, pero nuevamente, en vez de cerrar el partido hubo una nueva relajación y acabamos perdiendo 5-4 y de no ser por un paradón de Víctor nos habríamos ido con 6-4. Gran parte de la culpa fueron esas relajaciones y la calidad de su jugador número 11, el cual nos amargó el partido, ya que nos marcó 3-4 goles, un jugador del "B" del Olímpic y que a demás suele ir con su respectivo alevín.

Al mediodía se jugó el Costa Azahar-Olímpic, con resultado de 3-2 para el Costa Azahar y tras nuestro partido ante el Olímpic el Torresport jugaría contra el San Pedro, a quienes ganaron 2-1. Poco después, antes de nuestro 4º partido del sábado, el San Pedro vencería al Olímpic 3-2. Este último resultado nos obligaba a ganar al Costa Azahar, como así acabamos haciendo.
Por suerte, supimos transmitir al grupo la importancia de ganar este partido, ya que si no no dependeríamos de nosotros y tocaría esperar a ver qué sucedía el domingo por la mañana. El equipo salió muy concentrado, como siempre tratando de jugar al fútbol y nuevamente tuvimos delante un equipo que nos esperaba para salirnos a la contra, y nuevamente tocaba remontar: el costa Azahar conseguía el 0-1 con mucha suerte en un centro que se envenenaría y al que no llegó Víctor. Lejos de venirnos abajo, Pablo haría el empate poco después, en una gran jugada colectiva iniciada desde la defensa. Encontrábamos muchos agujeros en la defensa del Costa Zahar, pero el último pase solía frustrarse incomprensiblemente. Al descanso llegamos con 1-1 y la segunda parte fue vibrante y muy emocionante. Empezó muy bien además para nosotros ya que Adri conseguiría un golazo de falta por toda la escuadra. El Costa Azahar empezó a emplearse con dureza y lo más paradójico es que empezaron a amenazar al árbitro con marcharse si no les pitaba más a favor. Algo totalmente increíble para lo que se estaba viendo. Tras este gol, en vez de tener tranquilidad y aguantar más la posesión, el equipo se echaba arriba buscando hacer el 3º y así ir tranquilos cara al final del partido. Esto, sumado a la forma de jugar de contraataque del Costa Azahar, generó en un correcalles o partido de tenis del que salíamos perdedores. Daniel nos salvaba una y otra vez del empate y, por contra, una y otra vez fallábamos el 3-1. En una de esas, nos pillaron bien y batieron a Dani en un mano a mano. Pero, a falta de dos minutos para acabar, Hugo puso el 3-2 enganchando un balón en la frontal y cuando todos creíamos que se marchaba vimos como acababa entrando. Grandísima alegría del equipo con montañeta incluída. No hubo más sustos y acabamos ganando el partido, un partido muy igualado y muy costoso.

Y así terminaba el sábado.